Uno de los platos que no suele faltar en ningún recetario son las albóndigas. Hay miles de recetas, que se pueden preparar con carne, pescado y en versión vegetal. Hoy desde Carnes a domicilio os traemos una riquísima receta de albóndigas a la madrileña, que os encantará.

Ingredientes para preparar albóndigas a la madrileña

Para preparar esta increíble receta de albóndigas a la madrileña, necesitaréis:

  • 500 g de carne picada de ternera de Carnes a domicilio
  • 70 g de panceta ibérica de Carnes a domicilio
  • 50 g de miga de pan
  • medio vaso de leche entera fresca
  • 2 cebolletas
  • 3 dientes de ajo
  • 3 tomates maduros (o 1/2 kg de tomate triturado)
  • 1 vaso de vino tinto
  • 2 patatas grandes
  • 1 hoja de laurel
  • 1 ramillete pequeño de perejil fresco (o 1 cucharadita de perejil seco)
  • aceite de oliva virgen extra
  • pimienta negra recién molida
  • harina

Cómo preparar albóndigas a la madrileña

Preparando la carne

El primer paso para preparar estas albóndigas a la madrileña es picar bien la panceta. Los trozos deben ser muy pequeños, porque lo que queremos es que la grasa que aporta se distribuya bien por la carne.

Una vez picada, la mezclamos en un bol amplio con la carne picada, removiendo muy bien. A continuación, remojamos la miga de pan en la leche, la escurrimos ligeramente y la añadimos al bol.

Después, pelamos y picamos uno de los dientes de ajo y lo incorporamos también al bol, añadiendo también el perejil. Salpimentamos al gusto y mezclamos bien la carne para que quede una masa homogénea.

A continuación, formamos una albóndiga con la masa, la enharinamos y la freímos en aceite de oliva. Una vez lista, la probamos y corregimos de sal o pimienta en caso necesario. Este tipo de pruebas son muy prácticas, ya que permiten rectificar la receta antes de la elaboración final. Cuando la mezcla esté a nuestro gusto, formamos todas las albóndigas y repetimos el proceso. Es decir, formamos, enharinamos y freímos en aceite de oliva hasta que se doren, sin cocinarlas del todo.

Turno de la salsa

Una vez fritas todas las albóndigas, aprovechamos ese aceite para preparar la salsa. Por un lado, pelamos y picamos las cebolletas y los dos dientes de ajo restantes y los sofreímos a fuego medio-bajo con una pizca de sal, hasta que la cebolla transparente y empiece a dorarse.

Justo después, incorporamos los tomates rallados o el tomate triturado y subimos el fuego para que pierda el exceso de agua. A continuación, echamos el vino y dejamos que evapore el alcohol. Después, añadimos las albóndigas y la hoja de laurel y cocinamos a fuego lento unos 15-20 minutos.

Mientras tanto, pelamos y troceamos las patatas en daditos pequeños y las freímos en aceite de oliva. Cuando las albóndigas estén listas, añadimos las patatas fritas y removemos bien. Servimos y ¡disfrutamos!