El alce, no solo cautiva por su imponente presencia, sino también por las bondades que ofrece su carne. La carne del alce destaca por su alto valor nutricional, convirtiéndola en un tesoro gastronómico y saludable . Hoy, en Carnes Carrasquilla, os explicamos cuáles son las propiedades de la carne de alce.

Propiedades de la carne de alce

La carne de alce destaca por su alto contenido proteico, superando incluso a la carne de pollo, cerdo y cordero. En cada 100 gramos de carne de alce encontramos alrededor de 22 gramos de proteína. Se trata de un nutriente esencial para el crecimiento, mantenimiento y reparación de los tejidos del cuerpo.

A pesar de su riqueza proteica, la carne de alce es sorprendentemente baja en grasas, especialmente en grasas saturadas. De hecho, contiene solo un quinto de la grasa de la carne de vacuno. Esto la convierte en una excelente opción para quienes buscan una alimentación saludable y baja en calorías, ya que aporta solo unas 93 kcal por cada 100 gramos.

Por otro lado, la carne de alce es un verdadero cofre de nutrientes esenciales para el organismo. Es rica en hierro, zinc, fósforo, potasio y vitaminas del grupo B, especialmente B12, niacina y riboflavina. Estos micronutrientes son fundamentales para el correcto funcionamiento del sistema inmune, la salud cardiovascular, el mantenimiento de huesos y dientes fuertes, la producción de energía y el metabolismo celular.

A diferencia de otras carnes rojas, la carne de alce es rica en ácidos grasos omega-3, conocidos por sus beneficios para la salud cardiovascular. Estos ácidos ayudan a reducir el colesterol LDL (malo), disminuir la presión arterial y prevenir la formación de coágulos sanguíneos, lo que se traduce en un menor riesgo de enfermedades cardíacas.

Una carne singular

Además de todo esto, la carne de alce es una de las pocas carnes que contiene vitamina D de forma natural. Este nutriente esencial es fundamental para la absorción de calcio, el fortalecimiento de los huesos y el buen funcionamiento del sistema inmune.

Finalmente, la carne de alce tiene un sabor único. Su textura es magra y tierna, similar a la carne de ternera, y se puede cocinar de diversas maneras: asada, a la parrilla, guisada, en hamburguesas o incluso en tartar.