En Carnes Carrasquilla ofrecemos a nuestros clientes las mejores carnes. Estamos especializados en carnes exóticas llegadas de todos los rincones del planeta. Hoy queremos hablaros de las propiedades de la carne de cebra, buena para el paladar y para la salud.

Cuáles son las propiedades de la carne de cebra

Antes de entrar de lleno a hablar de las propiedades de la carne de cebra, presentaremos brevemente al animal.

Las cebras son mamíferos con forma similar a los caballos que viven en estado salvaje en diferentes regiones de África. Aunque a primera vista todas las cebras puedan parecer iguales, existen diferentes razas de cebras, las cuales se distinguen por la distribución de sus rayas.

Las cebras adultas suelen rondar los 300 kg de peso, pero dependiendo de la raza pueden llegar a alcanzar hasta 450 kg.

Su carne es de color rosa pálido y aspecto graso, aunque como veremos ahora, se trata de una carne bastante magra.

Una carne muy magra

Entre las principales características de la carne de cebra está su bajo contenido en grasa. Se trata de una carne muy magra o súper magra, que cuenta únicamente con entre 0,5 g  y 2 g de grasa por cada 100 g de carne.

Por otra parte, es muy baja en calorías, alcanzando apenas las 99 kcal por cada 100 g de producto.

Ambas características la hacen muy atractiva para deportistas y personas que estén controlando la dieta.

Buen aporte proteico

Otra de las grandes propiedades de la carne de cebra es su aporte proteico. De cada 100 g de carne obtenemos aproximadamente 21 g de proteínas. Éstas son fundamentales para la formación y mantenimiento de la masa muscular, entre otros beneficios.

Por tal motivo, se recomienda tanto a deportistas, como a niños y personas de edad avanzada.

Rica en hierro

Finalmente, cabe destacar que la carne de cebra es rica en hierro, un mineral imprescindible para prevenir la anemia.

Propiedades de la carne de cebra en la cocina

Si nos centramos en el valor gastronómico de la carne de cebra, ésta tiene un sabor parecido al de la caza, pero más suave y con toques dulces. Algunos dicen que está a mitad de camino entre la carne de cerdo y la de ternera.

Su corte más preciado es el solomillo, que suele prepararse a la plancha o parrilla. Simplemente, al ser tan magra, ha de tenerse cuidado de no pasarla de cocinado.

El resto de los cortes pueden prepararse fritos o para guisos, siendo muy habitual encontrarla en formato de carne picada: ideal para preparar hamburguesas, boloñesas y miles de deliciosos platos.

En Carnes Carrasquilla ofrecemos las mejores carnes, tanto tradicionales como exóticas. Si se puede tener lo mejor, ¿por qué conformarse con menos?