En Carnes Carrasquilla somos famosos por nuestras excelentes carnes exóticas. Sin embargo, también disponemos de exquisitas carnes tradicionales con las que preparar platos de la gastronomía española y de otras culturas. Un buen ejemplo de ello es el tonkatsu, un plato japonés que se prepara con ingredientes disponibles en nuestra cocina.
Qué es el tonkatsu
Este exótico nombre hace referencia a un plato muy conocido de la cocina japonesa, que se remonta a finales del siglo pasado.
Su origen se asocia a una adaptación al gusto japonés de la cocina occidental. De hecho, guarda bastantes similitudes con una milanesa o un filete Schnitzel.
La realidad es que detrás del exótico nombre de tonkatsu se esconde una chuleta de cerdo sin hueso, empanada y frita, que se sirve troceada.
Tradicionalmente se presenta acompañado de col picada y con salsa tonkatsu, similar a la salsa Perrins. Pero también puede servirse con arroz, con huevo, o como relleno de sándwiches o bocadillos.
Cómo prepararlo en casa
La receta de la salsa original contiene ingredientes que no son fáciles de encontrar en España. Sin embargo, os traemos una versión que sí podréis elaborar en vuestras cocinas.
Por un lado, toca elegir la carne. En este caso, pueden valer perfectamente tanto una chuleta de cerdo, como lomo o solomillo, cortados más gruesos de lo habitual.
Por otro lado, los ingredientes de rebozado: panko (o pan rallado si no lo encontramos), harina, huevo, sal y pimienta, sin olvidar el aceite para freír.
Adicionalmente, quedaría preparar el acompañamiento: col, ensalada, arroz, lo que nos apetezca.
Finalmente, la salsa casera de tonkatsu, que prepararemos mezclando 2 cucharadas de salsa Perrins, 5 de ketchup, 1 de soja y 1 de mostaza de Dijon. Hay otras versiones que incluyen azúcar o sake, pero ésta puede valeros como un primer acercamiento culinario.
La preparación del tonkatsu es muy sencilla. Tras salpimentar los filetes de cerdo, los pasamos por harina, los pasamos por huevo batido y finalmente por el pan rallado o panko.
Después, los freímos en abundante aceite caliente (a unos 180ºC) y los cocinamos hasta que queden dorados por ambas caras. Tras escurrirlos en papel de cocina, para retirar el exceso de aceite, los cortamos en tiras de unos 2 cm de ancho y los servimos con la salsa y los acompañamientos.
¡Que aproveche!
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